Un corazoncito tan grande y noble como el de nuestra Fe no podía meter a Inés en líos con la señá y dejar abandonada, así en cuidarla, y en otros menesteres bastante más ameno,s ha pasado la semana….
A pesar de su metedura de pata, o mejor dicho de su ida de la lengua, Fe busca lo mejor para su pajarillo, y por eso, además de disculparse una y otra vez, también insiste en que se aleje de La Casona y en lo tanto o más feliz que será lejos de esos muros, aunque ella lo vea imposible sin Bosco. Y tan acertada está en eso, como en afirmar que con la Paca la tendrán por una cosa o por otra… ¿por sisarle el licor quizá?
Un placer es volver a disfrutar de la sonrisa pícara de Marta por La Casona, y de ese encanto que sólo ella sabe darle al personaje de Fe, que borda cada tarde. Con la ocurrencia de echar un lingotazo de licor de hierbas de la señá pretendía nuestra preciosa pelirroja animar al pajarillo, pero como este anda más contento en el nido, o más exactamente en la piltra, finalmente tuvo que compartirlo con un capataz incapaz de resistirse a la bonita sonrisa de Fe y a los ojillos que le pone…. Pero nada que reprochar al hombretón, porque nosotros tampoco le diríamos que no a nada con esa carita ¿verdad?
Ahora sólo falta que además de aceptar sus propuestas, la enhebre de su brazo y nos la convide a un chato de vino en la casa de comidas ¿o eso ya es mucho pedir?
Pero claro, después de las confidencias con Mauricio, de lo que le contó sobre el encuentro de Inés y Candela y de ver al señorito rondando por las alcobas del servicio, Fe volvía a interesarse por el pajarillo, atisbo de una amistad, que podría llegar a ser tan bonita como la que surgió entre nuestra maravillosa doncella y Mariana, si Inés al fin confiase en Fe tanto como dice hacerlo y de una vez por todas le contase la verdad, cambiante o no, pero verdad al fin y al cabo….
Nos quedaremos mientras tanto, con la oportunidad que tuvimos nuevamente de disfrutar del gracejo y encanto enorme de Fe (a veces incluso comparable con el de Marta), y su intento de animar al pajarillo contando anécdotas de la capital, que según Fe tampoco hacen mucha risa, pero que a nosotros nos hizo esbozar la más amplia y sincera sonrisa de toda la tarde puentevejera….
Y nos quedaremos sobre todo con que nuestra maravillosa pelirroja ya está totalmente integrada en Puente Viejo e incluso se puede empadronar allí, o al menos ya está más que hecha a las costumbres locales… y si no fijaos, cualquier excusa es buena para una copa, y si es de coñac sisado a la patrona mejor que mejor….
Pero claro, nos pasamos con las copas y al final acaba una “tuesteando” pan de vaya usted a saber cuando… Eso sí, nadie tiene más encanto que nuestra Fe para incordiar a la doña y explicarle hasta cómo ha de hacerlo ¿se imaginará Fe a la señá entre fogones? Por qué no, si entre copa y copa de coñac ve una posible cualquier cosa….
Aunque por más coñac que beba, hay algo, o alguien, que no se va de la cabecita de la doncella más bonica de La Casona, y como ella misma diría tiene nombre de mozo… Un mozo que le da una lastimica tan indefenso, pero que tiene fama de ser el más bruto de toda la comarca :). Bruto o no, y aunque Fe lo achaque a tontás o al pavo del pajarillo, el rubor la delata y lo cierto es que se ha ganado su corazoncito por completo, o si no que nos explique que hace preocupada por lo mustio que está el capataz…
Mucho pavo tendrá el pajarillo según la Fe…. Pero parece que no el suficiente como para no pisparse de que Mauricio tiene también su media naranja por ahí. Lamentamos en gordo corregir a la señorita, pero lo que el hombretón tiene es una naranjita completa, maravillosa, con la sonrisa más dulce y bonica de esos lares y con un encanto que no se puede aguantar, ¿o acaso pensabais en un corazoncito acorazado entra cualquiera?
Y puestos a piropearla (o piropearlas si leéis entre líneas :P) diremos también que es más lista que los ratoncillos de campo, tremenda cara de circunstancia se gastaba nuestra doncella que no tiene un solo pelo de esa melena pelirroja de tonta, con el paripé de los tortolitos. Si ella no se lo creyó mucho, la señá menos, y a la larga eso complicará las cosas en La Casona, para ir estando preparada, nuestra Fe ya ha empezado a defender al pajarillo (tanto injusto el pajarillo dejando que su compañera de fatigas se lleve algún regaño con sus “teatrillos”) y será sólo un anticipo de lo que esté por suceder en una guarida de la doña donde parece volverán a tambalearse los cimientos con lo que está por venir…
Y como para lo que esté por venir hay una espera, os proponemos amenizarla de la mejor forma posible, con el enorme talento de Marta y el maravilloso trabajo que realiza cada tarde. Nos repetimos por aquí, pero no nos cansaremos de hacerlo, Fe es a día de hoy uno de los personajes más bonicos y mejor interpretados de Puente Viejo, cargado de matices y con un “algo especial” que no sabríamos definir pero que traspasa la pantalla hasta ganarnos por completo a todos aquellos que la seguimos, y eso sin duda es mérito de Marta, por ese arte y por ese saber hacer, enhorabuena bonica!.
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