Mucho pueden cambiar las cosas en sólo cuatro días por La Casona….
Y es que ahora estaríamos preguntándonos como Mariana se despide, de un día a otro, de La Casona y a nuestra esmirriá favorita le queda el nuevo uniforme como un guante casi al momento (un uniforme que por ahora le ha traído más sinsabores que otra cosa).Si no fuese porque lo que nos preguntamos es qué ha pasado para que la simpatía que la señá parecía sentir por Fe haya desaparecido por completo, dónde quedó la confianza que le hizo ponerla a su servicio, dónde está esa mano para la cocina que alababa el capataz….
Probablemente todo siga en el mismo sitio, y como pasa en muchas ocasiones, la doña (al igual que muchas de esas personas que no son felices con su vida) necesita sentirse superior, bien, realizada o como se quiera llamar a base de humillar a los demás, en este caso a alguien que además está poniendo todo de su parte para facilitarle el día a día. Pero lo cierto, es que eso no es una justificación a ese comportamiento, y que esas escenas dejan un sabor un tanto extraño…. Es maravilloso ver a Marta y a María bordando su interpretación, pero a la vez ese sentimiento que traspasa la pantalla deja la desazón de cuando en alguna ocasión nos hemos sentido así…
Dejando estas reflexiones a un lado, que por otro nos sirven para colar un elogio al trabajo de Marta :). No es solo la doña, quien no está tratando a Fe con el cariño que ella se merecería, el pequeño monstruito que intentan crear en La Casona, es alumno aventajado más en estos quehaceres que en protocolo, y convencido de que eso da seguridad al servicio, ya ha dejado atrás las palabras amables que le dedicaba para soltar algún exabrupto a la altura de su señá….
Pero bueno, con el corazón noble que se esconde tras la apariencia brutota de Bosco, esperamos que pronto se dé cuenta de que la seguridad viene dada por otras cosas, por una palabra amable, por una mano en el hombro, por la confianza con los ojos cerrados, la alegría de un reencuentro o un abrazo sincero.
Y eso ha sido lo que ha encontrado Fe por otros lugares de Puente Viejo, porque el mismo capataz que recelaba de ella a su llegada, ahora pondría la mano en el fuego por ella sin dudarlo, porque la cree sin excepción, sin necesidad de explicarse, porque la doncella más resalá de esos lares, además de nuestro corazoncito, se ha ganado por completo a un capataz que, aunque a veces ignore alguna lagrimilla, no escatima una palabra de ánimo cuando cree que es necesaria.
Al capataz, y a los futuros granjeros, que nos dieron una escena la mar de tierna y un momento de desahogo para nuestra bonita doncella. Y aunque saber que permanecerá junto a la señá no es, al menos de momento, gran alivio, tampoco es momento de arrepentirse ni echar de menos a una señá Bernarda que no atraviesa tampoco sus mejores días… Quizá va llegando el turno de secar esas lágrimas que asoman a los ojos de Fe y volver a hacer gala de ese desparpajo, que si una vez conquistó a la doña hasta el punto de dejarla turulata, ahora puede volver a hacerlo ¿no?
Vamos acabando este rinconcito por esta semana, reconociendo que aunque esa sonrisa, preciosa además, que tiene no nos gustaría que se borrase nunca de la carita de Marta. Que desaparezca de la de Fe no está mal de tanto en tanto, más que nada porque nos ofrece quizá la faceta más desconocida por ahora para nosotros de su interpretación, y que, como en todos los registros es absolutamente genial.
Ya con esto si que nos despedimos por hoy, pero antes servidora revienta si no añade algo, al reencontrase Fe con Marina en la casa de comidas, por un momento recordó la ternura y la cercanía con la que Marta te recibe con un abrazo si la encuentras a las puertas de un teatro. Y hablando de teatros, el Poliorama se llenará de grandes momentos y mejores artistas hasta el 27 de Julio con Mierda de Artista. Si tenéis la oportunidad id a verles y corresponded a todo ese talento con un cálido aplauso y todo el cariño que merecen.
Dicho esto, permitiéndonos el lujo de salir por un momento de la rutina puentevejera, os dejamos como cada semana con lo mejorcito de las tardes de Antena 3.
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